Verbitsky reveló las pretensiones militares del Gobierno de Macri contra Venezuela en 2019 | FOTO VN

**El servilismo de algunos gobernantes latinoamericanos ante EEUU se ha hecho más que evidente, así se trate de viles acciones contra la soberanía nacional de sus propios países, en contra la integración regional, o para favorecer agresiones imperiales que podríancausar el derramamiento de sangre de los pueblos de la Patria Grande.

CIUDAD MCY.- Nuevamente Venezuela fue estremecida con la noticia de que Argentina estuvo involucrada en la planificación y organización de una operación armada contra el país suramericano.

Una investigación periodística de Horacio Verbitsky, reveló que durante el gobierno de Mauricio Macri el ejército argentino se alistaba para una eventual invasión a Venezuela. El ejercicio militar pretendía derrocar al presidente Nicolás Maduro entre abril y julio de 2019 siguiendo los lineamientos de Estados Unidos.

Puma se llamó el ejercicio y bajo la supervisión del Comando Sur, la participación de unidades militares de ese país se debía desarrollar en siete sesiones en coordinación con unidades de la Armada y la Fuerza Aérea, todas bajo el mando del general Juan Martín Paleo, entonces jefe de la fuerza de despliegue rápido y hoy jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas.

La meticulosa investigación se enmarcó en la agenda golpista regional impulsada por el Grupo de Lima, ese ingrato cártel de países cuyas acciones judiciales no vinculantes que se plegaba incondicional al manual estadounidense. Y esto es fácil deducirlo por las decisiones de Macri, así como por la coincidencia temporal de los acontecimientos durante esos años.

TODAS LAS PIEZAS CONCUERDAN

Lo primero que hay que distinguir es el apoyo del entonces presidente argentino al gobierno paralelo de Juan Guaidó. La otra coincidencia es la primera sesión del ejercicio Puma, el 15 de abril, 15 días antes de la Operación Libertad, alzamiento militar encabezado por Guaidó cuyo único saldo a su favor fue sacar del arresto domiciliario a Leopoldo López.

En el portal de Verbitsky, El Cohete a la Luna, se puede apreciar cómo los nombres de Sudamérica y los actores políticos involucrados fueron cambiados para efectos del ejercicio.

“Sudamérica es denominada Patagonia del Sur. Venezuela es Vulcano y sus autoridades enfrentadas son NM y JG, es decir las iniciales de Nicolás Maduro y Juan Guaidó. Pero cuando se describe el operativo, el mapa es el de la República Bolivariana de Venezuela y se mantienen los nombres de sus principales ciudades. En este TEG paleolítico Colombia es Ceres; las dos Guayanas y Surinam son Tellus; Brasil es Febo; Perú y Ecuador son Fauno; Chile es Juno; la Argentina es Ares, el Uruguay es Baco, Paraguay y Bolivia desaparecen”, detalló Verbitsky.

El general comisionado para dirigir el plan militar intentó relacionar la operación a otro evento, la reunión del G20 en Buenos Aires, pero tal explicación cayó al vacío, imposible haber realizado un ejercicio militar para un evento que ocurrió muchos meses antes, el 30 de noviembre de 2018. Entonces Paleo cambió la versión y ante una exigente explicación de las nuevas autoridades del Ministerio de Defensa dijo que era para, adivinen qué?, “planificar la asistencia humanitaria a Venezuela”.

Por otro lado, jamás hubo una justificación legal para que el ejército argentino interviniera en Venezuela. Verbitsky argumentó que el componente que dirigía el general Paleo, la Fuerza de Despliegue Rápido, que es un factor de una fuerza multinacional, no tuvo aprobación de la ONU. Se trató de una tramoya del “multilateralismo” made in USA. Ejemplos de estas maniobras imperiales son muchas.

ORIGEN DE LA MANIOBRA

La organización del ejercicio fue en 2017 y tuvo que ver con un viraje de la política exterior en la administración de Donald Trump. El magnate presidente se centró en la «confrontación global con potencias hostiles, como China, Rusia e Irán», que representaban una «amenaza» para los intereses estadounidenses.

Eso también implicaba aplicarle la guerra a quienes negociaran con sus competidores y Venezuela le daba la “justificación”. «Trump también pensaba en el voto del exilio cubano y venezolano en Florida», consideró el periodista.

Evidentemente, el Comando Sur, a cargo del almirante Craig Faller, era el que iba a llevar a cabo los planes de la nueva Estrategia de Seguridad Nacional de Estados Unidos. «En mayo de 2019, mientras Paleo comandaba la segunda y tercera sesión del ejercicio de las Fuerzas Armadas argentinas para invadir Venezuela, el Comando Sur publicó el documento titulado Enduring Promise for the Americas», razona Verbitsky. La visita de Faller a Buenos Aires, coincide con el despliegue de las otras fases de Puma.

CLAVES PARA UNA INVASIÓN

El general Paleo describe algunas situaciones que deben ser interpretadas como claves para una narrativa que justificaban la invasión a Venezuela.

«Se ha generado una situación regional de inestabilidad en los países de Patagonia del Sur (Sudamérica) a causa de fuertes crisis económicas y políticas que son foco de atención de los principales organismos internacionales y regionales».

«Asimismo, se ha acelerado la crisis y la desestabilización desde el punto de vista político en algunos países del subcontinente».

«El caso de mayor conmoción interna en la región se presenta en Vulcano (Venezuela). El gobierno ha recurrido a su política exterior con la clara intención de buscar el apoyo de actores extra-regionales para mantenerse en el poder».

«La situación interna de Vulcano (Venezuela) se enmarca en una falta de entidad representativa de su doble gobierno (Nicolás Maduro y Juan Guaidó) y en una crisis humanitaria sin precedentes debido a la desorganización política y a la falta de servicios y necesidades básicas como suministro eléctrico, alimentos, agua y medicamentos».

«Existe una ruptura de la disciplina en las Fuerzas Armadas y de seguridad de Vulcano (Venezuela) a causa de profundas diferencias entre los que apoyan al gobierno y los que no, quedando su empleo limitado a la defensa de objetivos estratégicos nacionales puntuales».

«El gobierno ha recurrido al empleo de grupos paramilitares para mantener el control sobre la población, aunque todavía cuenta con apoyo parcial de sus fuerzas armadas y de seguridad».

«Los países de Patagonia del Sur son estados miembros de la Organización de las Naciones Unidas, en donde Febo (Brasil) y Ares (Argentina) este año son parte del Consejo de Seguridad».

«Existen países con problemas limítrofes con Vulcano, como es el caso de Tellus (las dos Guayanas y Surinam) y Ceres (Colombia). Estos estados son apoyados por potencias extra-regionales opuestas. Lo que limita al MERCOPAS (sic) y la ONU generar posibilidades de apoyo humanitario a Vulcano (Venezuela) por estos».

«El Presidente de Ares (Argentina), con la autorización del Congreso Nacional, decidió responder al pedido de la ONU (decreto N° 2005/19-Tropas armadas) para la integración de una fuerza multinacional provisional juntoa otros países de Patagonia Sur (Febo y Juno)»: refiriéndose a Chile y Brasil.

«La Fuerza de Despliegue Rápido (FDR) ha sido designada por el Ejército de Ares (Argentina)para integrar la fuerza multinacional provisional (FMP) como componente terrestre y se dispone preparar los planes para el alistamiento de una fuerza de tareas de Ares (FTA), a orden, y su posterior empleo en Operaciones Militares de Paz (OMP) en territorio de Vulcano».

Según Horacio Verbitsky, el ejército argentino estaría encargado de la operación para garantizar los tres «corredores de ayuda humanitaria». Específicamente le correspondería el de la frontera con Colombia, la más problemática por la inserción paramilitar y por donde intentaron ingresar a la fuerza al país durante la llamada «Batalla de los puentes» en febrero de 2019.

A casi tres años de la operación militar Puma queda demostrado que ningún país de la región tiene la disposición y voluntad propia de invadir a Venezuela. Finalmente, como siempre, se trataba de una maniobra imperial de tercerizar la guerra contra un país.

“Con independencia de la valoración política y moral que merezca un plan de invasión de Venezuela en el que soldados argentinos harían la tarea sucia para Estados Unidos, desde el punto de vista táctico transcurridos algo más de dos años desde la finalización del Ejercicio Puma, los supuestos en que se basaba se han demostrado erróneos”, concluyó el periodista.

MARCOS GAVIDIA
Tomado de: MISIONVERDAD.COM