CIUDAD MCY.- Como parte de la Campaña de Oriente, el 3 de agosto de 1813, hace exactamente 207 años, se desarrolló la Batalla Naval de Cumaná, donde el Coronel Santiago Mariño, junto a sus tropas, condujo la liberación de todo el territorio oriental de Venezuela, con excepción de Guayana.

Durante aquella jornada, los realistas se embarcaron en los buques de guerra y mercantes que tenían en Cumaná, zarpando en combate contra la flota republicana. Durante esa misma noche, las tropas de Mariño entraron en la ciudad y el oficial español Francisco Cervériz, quien sostenía Yaguaraparo en contra del venezolano José Francisco Bermúdez, terminó huyendo hacia Guayana.

Todo comenzó el 11 de enero de 1813, fecha en la que Santiago Mariño desembarcó en la Península de Paria, junto a un pequeño grupo de venezolanos que se encontraban exiliados en la Isla de Trinidad, haciéndose con el control inmediato de la provincia de Guayana, venciendo en el Alto de Los Godos al capitán general Domingo Monteverde el 25 de mayo.

Para el 31 de julio, Mariño logra reforzar a sus tropas y establece su cuartel en la chacra de Los Capuchinos, donde ofrece a Antoñanzas rendirse para así evitar muertes innecesarias. Mientras, en la Isla de Margarita se produjo el alzamiento de Juan Bautista Arismendi, quien además decapitó al gobernador Pascual Martínez, para luego decidirse a enviar refuerzos a Mariño.

Durante ese periodo, el gobernador de Cumaná se niega a rendirse y en medio de una refriega cerca del castillo San Antonio de la Eminencia logra que los republicanos intenten asaltar la fortaleza, hecho por el que Antoñanzas es herido gravemente mientras dirige la defensa.

Con dos días de asedio, el 2 de agosto Mariño se entera que durante la noche el gobernador y el sargento Juan Nepomuceno Quero planeaban embarcarse hacia La Guaira, dejando una pequeña guarnición para mantenerlos ocupados.

Ante esto, Mariño ordena a su escuadra que lideraba el bergantín Independencia del corsario italiano Giovanni Bianchi que impida su huida, pero cuando la flotilla patriota logra tomar posición logra evadirlos, abriendo fuego contra los barcos españoles más retrasados que respondieron.

Gracias a esto, Bianchi ordenó abordar a los enemigos y capturó tres buques mayores y cinco menores. En la madrugada del 3 de agosto Mariño entró en la ciudad ya victorioso.

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