CIUDAD MCY.- Para ver los bosques originales y disfrutar de sus increíbles colores hay que viajar un poco lejos, al menos desde Argentina, porque los bosques nativos de Eucalyptus deglupta, más conocido como Eucaliptos arco iris, son originarios de distintas zonas del Pacífico, como Nueva Guinea, Nueva Bretaña, Seram, Sulawesi (Indonesia) y Mindanao (Filipinas).

Sin embargo, vale la pena, porque caminar entre troncos de hasta 75 metros de alto y ramas cuyos tonos van del verde al amarillo, ocre o azul, es una experiencia única.

Sucede que si por algo se distingue este vistoso árbol es justamente por la variedad de colores de su corteza, que va cambiando de tonalidades a medida que distintos parchen van cayendo y renovándose a lo largo del año.

Inicialmente, apenas cae la corteza exterior, aparece una corteza interior verde brillante, que luego va oscureciéndose y por acción del oxígeno, el Sol y la lluvia va adoptando colores como azul, púrpura, naranja, y más tarde también tonos granates.

Actualmente, este tipo de eucalipto se cultiva en distintas partes del mundo, principalmente para producir pulpa para la fabricación de papel.

De hecho, en Filipinas es la principal especie utilizada en plantaciones destinadas a este fin.

También se cultiva, claro, como árbol ornamental, para embellecer jardines y parques tropicales y subtropicales. Eso sí, no es resistente a las heladas, por lo que será difícil encontrarlo por estas latitudes.

CORTESÍA