CIUDAD MCY.- El Gobierno de Gustavo Petro radicó este martes la primera parte de su gran reforma a la educación para emplazarla como derecho fundamental en Colombia.

La ministra de Educación, Aurora Vergara, asistió al Congreso para presentar un proyecto de ley estatutaria. Esta busca dejar atrás la reglamentación de la educación como un “servicio público cultural”.

Entre otras disposiciones, el texto establece que el ciclo de educación preescolar debe comenzar a los tres años de edad, en lugar de los cinco actuales.

“Estamos poniendo en las manos de ustedes, honorables representantes y senadores, la posibilidad de que los niños y las niñas en Colombia lleguen mucho más jóvenes a la escuela”, resaltó la ministra.

Las leyes estatutarias requieren de mayorías absolutas, en lugar de las mayorías de los presentes de las iniciativas ordinarias. Regulan derechos fundamentales y establecen los principios básicos que sirven como marco conceptual para otras normas.

En este caso, la iniciativa hace énfasis en aspectos como la universalidad de la educación, su adaptabilidad a contextos regionales y la inclusión en el sistema educativo de los grupos étnicos. También en las personas privadas de la libertad y los estudiantes con discapacidad.

“La ley estatutaria será la carta de navegación (…) En un contexto vertiginoso de cambio, este proyecto nos va a ayudar a enfrentar los retos de la transformación digital, la crisis climática y el peligro de la erosión de los valores democráticos”, aseguró Vergara.

Otros puntos de la reforma

La iniciativa extiende la edad de escolaridad obligatoria más allá de lo que contempla la Constitución de 1991, que la fija entre los 5 y los 15 años. El artículo 14 establece que el Estado debe garantizar el acceso a la educación preescolar desde los tres años.

Aunque el avance de los jardines infantiles en el sistema público no es nuevo, ahora será parte de “un derecho fundamental de las niñas y los niños menores de seis años”.

Asimismo, el artículo 16 reafirma que la educación media “será obligatoria”, algo establecido en una ley de 2015. Comprenderá los grados décimo y undécimo.

Según la ministra, esto ayudará a combatir la deserción escolar, que ronda el 50% en las zonas rurales de Colombia.

Otro punto central es la articulación entre la educación media y la posmedia, que incluye tanto a las universidades como a la formación técnica y al reconocimiento de aprendizajes y saberes previos.

El proyecto no entra en detalles, pero hace referencia a que esa conexión “puede suceder” a través de los grados duodécimo y décimo tercero. Esta modalidad implica que los estudiantes tengan la opción de cursar parte de la educación de nivel superior en sus colegios. También que luego puedan ingresar en semestres más avanzados de las carreras universitarias.

Contexto

La radicación de esta reforma a la educación por parte del Gobierno de Petro surge en un contexto de tensión con el sector privado. El miércoles, los rectores de cuatro universidades privadas publicaron una carta donde expresaron varias preocupaciones. Entre otros reclamos, piden que se reconozca la importancia del sector privado dentro de un sistema mixto de educación superior y que se establezcan mecanismos de control de calidad.

Por su parte, la ministra Aurora Vergara remarcó que el texto no perjudica al sector privado.

“Abrir estas nuevas rutas no quiere decir que le estamos quitando derechos a quienes históricamente han tenido privilegios. Este proyecto de ley busca fomentar más y mejores oportunidades”.

AGENCIAS