***Familias se dieron cita en las instalaciones del Gimnasio Rafael Romero Bolívar para surcar el cielo con Papagayos y pasar momentos de sano esparcimiento ***

Ciudad MCY-En las instalaciones del Gimnasio Rafael Romero Bolívar, los niños y niñas del municipio Mario Briceño Iragorry, junto a sus padres y representantes participaron en el I Festival de Papagayos que se llevó a cabo en esa jurisdicción.

La extraordinaria actividad se realizó a fin de promover el rescate de los juegos tradicionales venezolanos, la amistad y el compartir del calor familiar en una mañana diferente, sin aparatos tecnológicos y en un espacio abierto donde los sueños, colores y el amor surcaban el cielo.

El director de Cultura y Educación en esa localidad, Jhonathan Sifontes, indicó que el objetivo inicial era «recordar, llamar a esa niñez, por lo menos nosotros los adultos, y valorizar a los niños con la importancia de los juegos tradicionales».

«Ese encuentro de domingo familiar, de unión, para distraernos un rato y olvidarnos de tanta tecnología, salir del hogar para disfrutar de este momento» acotó Sifontes.

Es valioso destacar que el vuelo de papagayos, cometas o papalotes, como también se les suele conocer, permite desarrollar la movilidad y la agilidad física en los más pequeños; en esta ocasión, además permitió crear una sana competencia y habilidades de socializacion.

Asimismo, detalló que junto a la Alcaldía del Municipio Mario Briceño Iragorry, la Dirección de Ecosocialismo y Turismo, Instituto de Cultura y Educación del Municipio, equipo promotor de la Comisión de Cultura para la Creación del Consejo Parroquial de Cultura, trabajarán en la organización de nuevas jornada culturales y recreativas.

Por su parte, María Belén Padrón, miembro del equipo promotor de la Comisión Cultural, aseguró: «nosotros los venezolanos seguimos apostando por la felicidad, la esperanza y seguimos volando papagayos porque es nuestra tradición».

Union familiar

Durante la mañana nublada numerosas familias asistieron a la convocatoria, entre ellos se encontraron el señor Carlos Piña y su nieto. Él calificó la iniciativa como maravillosa, justa y necesaria para que los niños retomen sus raíces.

Asimismo, el pequeño Ismael Ilarraza, con optimismo y emoción expresó la felicidad que le proporciona volar papagayos junto a sus seres queridos.

Thaimara Ortiz