CIUDAD MCY.-El Instituto Autónomo Biblioteca Nacional y de Servicios de Bibliotecas, durante 190 años se ha encargado del resguardo y conservación de la memoria documental venezolana, tarea en la que la División de Depósito Legal ha jugado un papel fundamental. Aunque las donaciones y adquisiciones de libros son importantes, el principal y más frecuente método de ingreso de obras a las colecciones de la Biblioteca Nacional, es a través del Depósito Legal.
Este departamento, que forma parte de la Dirección de Desarrollo de Colecciones, es el encargado de “asegurar el ingreso de todos aquellos materiales bibliográficos, no bibliográficos y audiovisuales producidos en el país y en el exterior, con circulación en Venezuela”, tal como indican en su página web, con el noble objetivo de preservar la memoria nacional, y facilitar el acceso universal a la información para todos los usuarios.
Desde el año 2016, el ingreso de las obras al sistema se realiza de forma digital a través de su página web “Sistema Automatizado de Depósito Legal”, o por sus siglas SADEL, el cual vino a facilitar y agilizar el proceso de incorporación de material nuevo a la Biblioteca, que hasta entonces era un trámite presencial y manual. De esta forma, se ha optimizado el rendimiento en los últimos años, pues al ser un proceso completamente online, se puede acceder a él desde cualquier rincón del territorio nacional sin ningún inconveniente.
La Biblioteca Nacional se hace responsable del cumplimiento de su deber como institución encargada del patrimonio documental del país, custodia la preservación de la memoria venezolana, mediante la recaudación proactiva de las obras producidas en el territorio nacional, pone a disposición del público un servicio rápido y sin papeleos, que optimiza el proceso del registro de las obras para su consiguiente resguardo, conservación, y posterior accesibilidad para los usuarios.
AGENCIAS