CIUDAD MCY.- Un tanto de penalti de Debinha fue suficiente para que Brasil venciera este sábado por 1-0 a su similar de Colombia y levantara así su octavo título de la Copa América Femenina en el estadio Alfonso López de la ciudad de Bucaramanga, reseñaron medios deportivos.
El imbatible equipo que dirige la sueca Pia Sundhage terminó el torneo con una racha de seis partidos ganados de seis posibles, en los que anotó 20 tantos y no recibió ninguno.
Desde los primeros minutos el juego estuvo muy luchado en la mitad de la cancha y la seleccionadora de Brasil tuvo que lidiar con un problema grande: la salida de la centrocampista Angelina al minuto 8 por una lesión tras un choque con la colombiana Lorena Bedoya.
La Canarinha trató de hacer daño por el costado izquierdo con Adriana, que complicó a Daniela Caracas, el reemplazó en el once titular de la lateral Mónica Ramos, mientras que la selección Cafetera apeló a la creatividad de Leicy Santos y a la velocidad de Linda Caicedo para hacer daño.
Los primeros acercamientos del conjunto anfitrión ocurrieron en un contragolpe al 13, liderado por Caicedo, y en un tiro libre al 20 que cobró Catalina Usme y, exigida, lo atajó Lorena.
Las colombianas incomodaron a una Brasil que no encontraba su mejor versión y dependía mucho de las aventuras individuales de Adriana, que casi anota el primero al 32 con un remate de media distancia que pasó cerca del palo derecho de la portería de Catalina Pérez.
Pese a que no estaba mostrando su mejor fútbol, la Verdeamarela encontró un penalti cuatro minutos después, cuando la lateral Manuela Vanegas derribó en el área a Debinha, quien al 38 cobró y celebró para silenciar al estadio Alfonso López.
En los minutos finales, pese al desgaste y cansancio, las anfitrionas se volcaron al campo brasileño y buscaron el empate como pudieron, pero las brasileñas aguantaron bajo la sombra de las centrales Tainara y Rafaelle, que lograron apagar casi todos los incendios provocados por la habilidad de Caicedo y la creatividad de Santos.
La jueza argentina María Laura Fortunato pitó el final del partido y Sundhage, su cuerpo técnico y las jugadoras estallaron en júbilo porque en Bucaramanga consiguieron su octavo título de la Copa América, que se suma a los logrados en 1991, 1995, 1998, 2003, 2010, 2014 y 2018.
Cortesía El Aragüeño