CIUDAD MCY.- .El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, declaró ante la ONU que durante años el régimen de Kiev ha realizado una campaña de intimidación contra su población rusoparlante.

Durante la reunión ministerial del Consejo de Seguridad de la ONU dedicada al conflicto en Ucrania, el alto funcionario señaló que en todo ese tiempo las estructuras internacionales no han tenido el valor para obligar a Ucrania a cumplir con sus obligaciones en el campo de los Derechos Humanos (DD.HH.).

«Se enviaron más de tres mil demandas sobre crímenes de Ucrania contra los habitantes de Donetsk y Lugansk a la Corte Penal Internacional, y no hubo respuesta alguna», señaló Serguéi Lavrov, citado por la agencia de noticias Sputnik.

Para el canciller ruso, los países occidentales silencian los hechos inconvenientes sobre los crímenes de guerra cometidos por Ucrania y, «a veces, francamente ocultan la verdad».

«La verdad inconveniente que salpica la imagen de Ucrania como víctima de la llamada agresión se silencia cuidadosamente y, a veces, se ignora abiertamente. Incluso la organización occidental de Derechos Humanos Amnistía Internacional, de la que difícilmente se puede sospechar que simpatiza con Rusia, fue severamente criticada y tachada como agente del Kremlin sólo porque, en su informe, esta estructura confirmó los hechos bien conocidos de que Kiev despliega puntos de combate y armamento pesado en instalaciones civiles», recordó el ministro.

Cabe destacar que, el 04 de agosto Amnistía Internacional publicó un informe que denuncia la violación de las leyes de guerra por Ucrania y el despliegue de equipos y armas militares en escuelas y hospitales. La publicación provocó una reacción negativa en Ucrania.

Asimismo, el ministro señaló que Rusia tiene múltiples pruebas de crímenes de guerra cometidos por los neonazis ucranianos y mercenarios extranjeros.

«Tenemos mucha evidencia de los actos criminales del régimen de Kiev, que se han cometido regularmente desde 2014. Las agencias rusas encargadas de hacer cumplir la ley, en cooperación con colegas de las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, registran e investigan cuidadosamente estos crímenes», especificó.

Lavrov se refirió también el tema de la ayuda militar que varios países de Occidente ofrecen a Kiev. En sus palabras, estos se están convirtiendo en un bando del conflicto en Ucrania, al saturar cínicamente con sus armas ese país.

«Es especialmente cínica la postura de aquellos Estados que saturan de armas y equipamiento militar a Ucrania, entrenando al personal de las Fuerzas Armadas de ese país. El objetivo es obvio, no lo ocultan y lo declaran: prolongar en lo posible las hostilidades, a pesar de las víctimas y la destrucción, para desintegrar y debilitar a Rusia», señaló Lavrov.

Para el jefe de la diplomacia rusa, esa actividad «significa la participación directa de los países occidentales en el conflicto ucraniano, los convierte en su parte».

«Hemos presentado una gran cantidad de hechos que muestran cómo Ucrania se estaba preparando para desempeñar el papel de una ‘anti-Rusia’, el papel de una plaza para forjar e implementar las amenazas contra la seguridad rusa. Me atrevo a asegurarles que no lo permitiremos», conluyó el ministro ruso.

Información AVN