CIUDAD MCY.- El vicepresidente sectorial de Comunicación, Cultura y Turismo, Freddy Ñáñez, indicó la necesidad de trabajar para desmontar los discursos de odio y xenofobia, en aras de construir desde el lenguaje de la hermandad una frontera que sea punto de inicio para la integración entre Colombia y Venezuela.
En su intervención como parte del primer recital de poesía del Encuentro Binacional de Poetas por La Paz, transmitido por Venezolana de Televisión (VTV), desde la ciudad de Cúcuta, Colombia, Ñáñez resaltó la oportunidad que genera la reapertura de la frontera para ambas naciones.
«Hay mucho por trabajar, por construir, pero también hay mucho por desmontar, por ejemplo: desmontar los discursos de odio, desmontar por supuesto la xenofobia y construir desde el lenguaje de la hermandad la oportunidad de que esta reapertura de la frontera sea el punto de inicio para la integración», expresó.
El también ministro del Poder Popular para la Comunicación y la Información celebró la realización del encuentro de poetas colombo-venezolano, como parte de la antesala, para que esta frontera se vuelva abrir el próximo 26 de septiembre a partir de la voluntad de los presidentes Nicolás Maduro y Gustavo Petro.
«Celebramos que este encuentro de poetas colombo-venezolano sea la antesala, el prólogo, el preámbulo, para que esta frontera se vuelva abrir el próximo 26 de septiembre por una voluntad que hay que reconocer, del presidente Nicolás Maduro y el presidente Gustavo Petro, vuelve entonces el río a su cauce, y vuelve él a abrirse para que pase por acá la hermandad», destacó.
Asimismo, indicó que a los poetas participantes les corresponde aportar mucho más que la presencia en encuentro, para lograr sanar heridas y construir desde el lenguaje nuevas formas de reconocernos.
«Nos corresponde a nosotros que somos escritores, que somos poetas, aportar mucho más que nuestra presencia en este encuentro, nos corresponde a nosotros construir desde el lenguaje nuevas formas de reconocernos», agregó.
Relató que en su cruce por el puente Simón Bolívar hacia la ciudad de Cúcuta sintió la sensación de caminar en círculo, de regreso a su misma casa.
«Crucé el puente Simón Bolívar por enésima vez, la única diferencia es que la penúltima vez y esta vez ocurrieron muchas cosas; caminar por ese puente un día como hoy me hizo pensar, sopesar qué significaba atravesar por ese puente, saber que te despide una bandera tricolor y que te recibe en el otro extremo la misma bandera tricolor, de la sensación de cuando caminamos por ese puente estamos caminando en círculo y nos estamos devolviendo a nuestra casa», concluyó.
Información AVN