FOTO CORTESÍA

 

CIUDAD MCY.-En los espacios de la Casa Insurgente Bolívar Chávez se realizó la Cátedra Federico Brito Figueroa, por los 160 años del natalicio del doctor José Gregorio Hernández, para destacar entre los venezolanos su figura espiritual y milagrosa.

La ponente de esta cátedra fue la profesora Francis Arguinzones Lugo, quien estuvo en compañía del profesor Manuel Carrero Murillo, quienes destacaron los datos biográficos no solo del santo, sino del médico, el científico, el sastre, el profesor y el músico.

La profesora Francis Arguinzones contó que a los 14 años el joven José Gregorio partió a Caracas realizando un gran recorrido en el cual debía pasar por Maracaibo, Curazao, La Guaira para entrar a la capital por el Camino de los Españoles ubicado en el Waraira Repano.

Relató que la primera conversación que tuvo al llegar a Caracas fue con el señor Guillermo Tell Villegas quien le preguntó “qué vienes hacer a Caracas” a lo cual le respondió “no olvidaré que mi primera obligación es ser buen estudiante, pero, por sobre todo seré buen cristiano”.

Según la narrativa de la profesora una de las grandes aficiones que tenía era el baile. «Le gustaba mucho bailar e iba a la Plaza Bolívar a las parrandas a disfrutar del baile cada vez que podía ya que también aparte de melómano era un buen bailarín», relató.

De acuerdo con la profesora, la sugerencia que daba el Dr. José Gregorio Hernández siempre fue la resistencia para soportar los obstáculos y las adversidades y la oración permanente.

La profesora expresó que fue un hombre muy nacionalista ya que luego de prepararse en el exterior regresó a su país natal para poner en práctica todo lo aprendido, lo cual «sirvió para la modernización de la medicina, darle sentido teórico y práctico al ejercicio de la medicina, tuvo visión de universidad al servicio del pueblo», reflexionó.

FUENTE CIUDAD CCS