Ciudad MCY.– Un intento violento para atentar contra la vida del exvicepresidente de Ecuador, Jorge Glas, denunció este domingo su abogada, Sonia Vera, tras advertir que el exfuncionario secuestrado de la embajada de México, donde estaba asilado, corre peligro de muerte en la cárcel de máxima seguridad La Roca, en Guayaquil, donde se encuentra privado de su libertad.
De acuerdo con Vera, al político lo evacuaron de emergencia, lo cual “confirma lo que hemos denunciado una y otra vez: están jugando con su vida deliberadamente”.
La plataforma ciudadana SOS Cárceles informó que Glas fue evacuado debido a que los privados de libertad se amotinaron y aparentemente habrían querido atentar contra su vida, bajo las órdenes de Luis Alfredo Arboleda, conocido como Gordo Lucho, líder del grupo terrorista Los Lobos.
La abogada Vera insistió en que su defendido está expuesto a un entorno que no protege su vida, sino que la amenaza día tras día, y subrayó que esa situación es el resultado de un Estado presidido por Daniel Noboa, que lo ha condenado al peligro, la tortura y la muerte lenta. “Si algo le sucede, será un crimen del Estado”, enfatizó la jurista que solicitó de manera urgente la intervención de organismos internacionales.
Glas formó parte del gobierno de Rafael Correa (2007-2017) y se desempeñó como vicepresidente entre 2013 y 2017, además de los primeros meses del mandato de Lenín Moreno (2017-2021), hasta que iniciaron acusaciones e imputaciones en su contra, que siempre ha negado.
El ex vicegobernante, considerado uno de los símbolos de la persecución judicial o “lawfare” en Ecuador, recibió de forma temporal la prelibertad el 28 de noviembre de 2022 luego de la unificación de dos penas de cárcel de seis y ocho años por los casos Odebrecht y Sobornos; sin embargo, la medida fue revocada.
A inicios de 2024, la justicia ordenó su captura por presunto peculado en el caso Reconstrucción de Manabí, pero lo hizo al violar las leyes internacionales luego que Glas pidiera y obtuviera asilo en la embajada de México.
Glas fue llevado a la prisión de La Roca luego de que el pasado 5 de abril fuera detenido tras el asalto de las fuerzas de seguridad ecuatorianas a la embajada de México en Quito, donde se encontraba refugiado desde diciembre de 2023.
Pese a la queja del gobierno mexicano, hasta la fecha, ningún organismo internacional de Derechos Humanos ha tomado posición ni condenado al Estado ecuatoriano por la flagrante violación del Derecho Internacional.
Fuente: ÚN