Ciudad MCY.- “Yo tengo esa gran fe en el destino de Venezuela y sé que estamos del lado correcto de la historia, sé que estamos en el camino correcto y sé que cada vez más se unen y se suman voluntades de la gente buena de Venezuela, para nosotros ver a nuestro país cada vez más próspero, mejorando, elevándose”, expresó el presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, al explicar que los venezolanos y venezolanas construyen un nuevo Estado productivo que produce riqueza y satisface las necesidades internas y tiene vocación exportadora.
“Esa fuerza de un país que produce, un país que va construyendo una economía propia, sobre nuevas bases, un nuevo modelo esencialmente productivo que produzca bienes, servicios que satisfagan las necesidades del país, de nuestro pueblo, que produzca riquezas y que sea una base sólida para construir lo que es indispensable”, dijo el mandatario nacional, en Caracas, donde realizó una jornada del Consejo Nacional de Economía Productiva, Capítulo Consejo venezolano para la Calidad.
En términos de civilización humana, acotó, para tener un país estable, democrático, en paz, es indispensable la igualdad y construir la igualdad sobre la base del bienestar social y los derechos sociales.
“Construir la igualdad y eso sólo lo puede garantizar un Estado fuerte, un Estado nuevo, estoy hablando de un Estado nuevo y es una de las grandes tareas que tenemos en la sociedad venezolana: construir un nuevo Estado, moderno, honesto, ampliamente tecnológico y profundamente democrático, que le sirva al país, que le sirva al pueblo, que tenga poder para echar andar la sociedad en sus múltiples dimensiones de manera equilibrada, y que construya un país en paz estable integrado sobre la base de una economía fuerte productiva, sobre la base de una sociedad de iguales, de bienestar social, de derechos sociales satisfechos y sobre todo, sobre la base de una conciencia superior del destino y la historia de nuestro país, y eso sólo se puede lograr con valores”.
Finalmente, alertó que para el Gobierno Bolivariano no hay nada imposible y la prueba está en que, tras agresiones extranjeras, se realizó un gran cambio económico sin precedentes, que puede ser considerado un cambio estructural histórico, para pasar de una economía rentista dependiente y enfrentar una guerra económica brutal, en las condiciones más adversas, e innovar fórmulas nuevas en un mundo que ya no está hecho para hegemonismo ni sanciones.
“En una primera etapa lo logramos, en seis años, cuando convocamos el Consejo Venezolano de la Economía por primera vez. Muchos dijeron que eran ideas ilusas, que están locos y no lo lograrán. Pero nosotros, conociendo a Venezuela y su capacidad y su potencia productiva, sabíamos que era posible. ¡Lo logramos!”
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