***Grandes decisiones de vida se convierten en plataformas para alcanzar metas, e Ylda Guerra, una vendedora de medicina natural que lleva alrededor de 40 años en el Mercado Libre de Maracay, es muestra de ello. Una mujer de temple, gran carisma y determinación que adoptó al estado Aragua como su tierra para florecer
CIUDAD MCY.- Cada región posee un encanto particular que la diferencia, aspectos como atractivos naturales, edificaciones emblemáticas y hasta su gente, forman parte de los elementos que las hacen únicas. En Maracay, estado Aragua, el popular Mercado Libre, ubicado en la avenida Ayacucho, es un sitio cargado de historia que a lo largo de los años ha ofrecido desde animales de granja, hasta grifería para baños, en un solo sitio.
No solo la inmensa variedad del mercado lo hacen especial, también los emprendedores, quienes con su personalidad y productos a ofrecer han adquirido renombre tanto dentro, como fuera del recinto económico que hoy en día se perfila como un sitio tradicional al que muchos maracayeros han visitado alguna vez en su vida.
Tradición natural
Ylda Guerra, oriunda de Colón, estado Táchira, nos comparte su historia como vendedora en el Mercado Libre, al que llegó hace casi 40 años, “esto era hermoso, venía bastante gente, hasta costaba caminar”, apuntó la emprendedora de 79 años, quien actualmente se dedica a comercializar medicina natural tradicional como ramas y cortezas secas de plantas, mezclas de jarabes naturales y ungüentos artesanales, entre otros.
Uña de gato, zarzaparrilla, castaña de India, semilla de brusca, palotal, altamisa, mejorana y fregosa, se encuentran entre las plantas más vendidas, según apunta la abuelita, quien debió adaptarse a los cambios socioeconómicos y su situación de madre soltera, por lo que en un duro momento de su vida decidió apuntar a la medicina natural, debido a la alta confiabilidad popular que se otorga a este tipo de tratamientos, tal como refirió Guerra.
Y es que, a través de su experiencia, hoy puede afirmar que sus productos no solo son buscados por gente mayor, también por generaciones más recientes que eventualmente deciden seguir tradiciones. “Hay personas que buscan otras alternativas para depurar y sanar su cuerpo, por eso los preparados para problemas de colon y riñón son los que más vienen a comprar”, asegura.
Un gran vuelco
La tachirense no solo cuenta en su haber esta larga experiencia laboral, también relata que fue cuidadora de niños por cinco años y por razones de peso decidió incursionar en este mundo, “quedé sola con mis dos hijas, llegué a Maracay donde me cambió la vida. En ese entonces vendía productos a crédito, vi la oportunidad de adquirir un puesto acá en el mercado y cuando me entregaron los papeles me sentí muy feliz porque sabía así podría proveer a mi familia”, aseveró Ylda Guerra.
Esa decisión que la llevó a ser propietaria del quiosco 22, módulo 1, hoy cuenta con gran alegría y satisfacción, porque entre las metas alcanzadas, asegura que pudo garantizar las necesidades básicas a sus hijas, quienes ha visto crecer y formar su propio hogar. También comenta que gracias a su emprendimiento pudo adquirir una casa en la que actualmente convive con su otro hijo.
El secreto
Entre las claves para llegar a los 79 años con el carismático semblante que la caracteriza y brindar una buena atención desde su puesto de trabajo, Ylda Guerra mantiene una premisa de vida, “llevar las cosas con calma”, asimismo, comenta que la buena alimentación y por supuesto, la medicina natural en la que confía plenamente también han sido parte de sus prácticas de vida, “todo lo que vendo lo he probado, por eso garantizo que cubrirá sus expectativas”, dijo.
OROIPSIS GIL