CIUDAD MCY.- En los espacios de la Librería del Sur el Teatro Teresa Carreño fue presentada la obra La belleza de la autora chilena Amanda Durán, en ocasión de la edición 17 del Festival Mundial de Poesía. El vicepresidente sectorial de Comunicación, Cultura y Turismo y poeta, Freddy Ñáñez, indicó que la obra responde a las preguntas de la poesía del origen y término de la vida.

El vicepresidente Ñáñez, editor de la obra publicada por la Editorial Acirema, explicó que “La belleza es un poema que emerge como destellos de luz de un profundo claroscuro oscilante, entre la visión y el ocultamiento, el silencio y la palabra que solo admite el grito, la violencia de sentirlo y la aquiescencia de convertir el dolor en poema”.

Mencionó que la narrativa de Amanda Durán “tiene el vigor y la solidez de la furia que enuncia y, con ello, arranca al silencio en páginas blancas que su poesía transforma en ofrenda, memoria y monumento”.

La poesía de Durán “nos conduce directamente a pensar los problemas fundamentales de la existencia humana que tienen que ver con las preguntas: qué significa vivir y qué significa verdaderamente morir. Son estas dos preguntas las que justifican toda la literatura”.

La Belleza “se trata de un solo poema, que va sucediéndose, que aparece de distintas maneras que guarda en una misma voz y un mismo registro. Una sonoridad y una imagen que pueda llegar hasta el otro para explicarle qué significa la muerte para nosotros. Es decir, qué significa la muerte, la finitud más allá de lo que ella va trazando en las almas individuales”.

Dijo que es “muy poderoso el poema que vamos a enfrentar, porque ese poema tiene la posibilidad de arrancarnos de nuestra propia conciencia individual, convertirnos en una sola conciencia, en una sola vibración donde el dolor y la celebración se acompañan”.

El viceministro expresó “nosotros creemos que la poesía es afirmación y deleite. El poeta no escoge narrar. El poeta no está dispuesto a traspasar a través de la línea del tiempo, un ser, un alma, un acontecimiento para llevarlo a su finitud”.

“El poeta – es lo que yo creo que hace Amanda Durán- sostiene en la afirmación y en el deleite el derrumbe y vive y reencarna el derrumbe, aquello que es herida, aquello que es desvanecimiento y lo hace perenne como un saber, lo hace perenne como un afecto y también lo hace perenne como una verdad” expresó Náñez.

AGENCIAS