***Las 56 pérdidas humanas es lo más lamentable de este tragedia que golpeó fuertemente el municipio Santos Michelena, con globos blancos, cantos y oraciones rindieron honores a los fallecidos***
CIUDAD MCY.- El pasado 8 de octubre demostró lo frágil que es la vida y lo fuerte que es la naturaleza, al marcar una historia triste en el municipio Santos Michelena, con el deslave de tierra que no sólo dejo pérdidas materiales, sino también humanas.
Este hecho enlutó los corazones de muchas familias en Las Tejerías, y luego de un mes de esta tragedia feligreses y creyentes acudieron a la misa en memoria de los fallecidos en la parroquia Nuestra Señora Del Carmen de Las Tejerías.
Luego de celebrarse la misa realizaron una procesión con velas encendidas junto al Santísimo Sacramento por una de las calles más afectadas por el deslave, y en el sector Castor Nieves realizaron un acto simbólico al elevar globos blancos con los nombres de los fallecidos al cielo, orando por el descanso de su alma y honrando su memoria.
Pedro Hernández, alcalde de la jurisdicción, hizo entrega de 56 rosas blancas a las familias que sufrieron pérdidas humanas, simbolizando esto su solidaridad y empatía ante la difícil situación por la que han tenido que pasar.
«Esta flor representa una honra a esos 56 héroes y heroínas que perdieron su vida en esta lamentablemente tragedia», dijo.
Asimismo, agregó que «está situación lo que me ha enseñado lo puedo decir en dos palabras, amor y solidaridad, porque Las Tejerías fue epicentro de esos dos importantes valores que se enaltecieron ante esta contingencia».
También añadió que el pasado 8 de octubre nació un nuevo Pedro Hernández, «no soy nacido ni crecí acá en Las Tejerías, pero hoy amo y valoro más que nunca este hermoso municipio por el que voy a seguir trabajando por brindarle bienestar».
Por su parte, las familias de los fallecidos vivieron momentos conmovedores por esta actividad tan significativa, que aseguraron quedarán guardado en sus corazones, ya que la hora en la que se llevó a cabo el acto coincidió con la hora en la que se suscito el deslave.
JENNILET DÍAZ / FOTOS MARÍA FERNANDA GIL
