CIUDAD MCY.- La cooperación internacional hacia Cuba se activó tras los graves daños ocasionados por el huracán Melissa, con el apoyo inmediato de países como Venezuela y de organizaciones regionales como la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), que enviaron cargamentos con alrededor de ocho mil toneladas de ayuda destinados a las familias afectadas.

El ciclón azotó la región oriental de la nación caribeña el 29 de octubre pasado y provocó incontables daños materiales, pero no dejó víctimas mortales.

En la provincia de Santiago de Cuba, el puerto Guillermón Moncada se ha convertido en el principal punto de recepción de los cargamentos enviados por países aliados y organizaciones internacionales.

Desde ese lugar, trabajan de forma conjunta la Empresa de Servicios Portuarios del Oriente y las autoridades locales para asegurar la entrada y distribución de los suministros.

La directora de la Operación Puerto–Transporte–Economía Interna, Lurnie Batista Oliva, explicó que el proceso funciona como un sistema encadenado desde la llegada del buque hasta la entrega final de los donativos. “Cuando el barco atraca, comienza una operación donde intervienen el operador portuario, los transportistas y todas las entidades que recibirán los recursos”, señaló, al destacar la coordinación interinstitucional.

Batista dio a conocer que el Consejo de Defensa fue el responsable de elaborar el registro oficial de damnificados y de organizar la distribución en función de las necesidades declaradas.

Asimismo, explicó que cada embarcación se recibe con un inventario preciso de su carga, lo que permite garantizar una asignación transparente y eficiente. “Siempre velamos porque estas mercancías lleguen de forma rápida y con calidad a quienes realmente las necesitan”, añadió.

Por su parte, la directora comercial de la Empresa de Servicios Portuarios del Oriente Madeline Hernández Verdaguer, informó que ya arribaron dos buques procedentes de Venezuela.

Uno de ellos, enviado por el ALBA-TCP y denominado Manuel Gual, concluyó sus operaciones tras descargar 102 contenedores que incluían alimentos como arroz, pasta, azúcar y leche en polvo, además de láminas de acero, colchones, agua embotellada, ropa, calzado, artículos de higiene y medicamentos.

El segundo buque continúa en labores de descarga e incluye más de dos mil bolsones con arroz, azúcar y pastas alimenticias, además de colchones y contenedores con accesorios eléctricos destinados a la recuperación de comunidades severamente afectadas.

Fuente: TeleSUR | FOTO CORTESÍA