CIUDAD MCY.- Chile decidió militarizar la frontera con Perú y Bolivia para controlar la migración irregular, en el marco de la Ley de Infraestructura Crítica, las unidades militares tendrán la facultad de realizar controles de identidad, fiscalizar equipajes y detener a quienes ingresen por puntos no autorizados, y en algunos casos, efectuar disparos de advertencia, reseñaron agencias informativas internacionales.

El gobierno del actual presidente de Chile, Gabriel Boric, busca controlar el flujo migratorio enviando militares a las carreteras, cientos de efectivos fueron situados en distintos puntos de las áreas limítrofes de Arica y Parinacota, Tarapacá y Antofagasta en Chile, como parte de un operativo que estará vigente durante 90 días y puede ser extendido con la aprobación del Congreso Nacional.

El investigador en el Centro de Estudios Migratorios de la Facultad de Humanidades de la Universidad de Santiago de Chile, Byron Duhalde, explicó que “desplazar a las Fuerzas Armadas a la frontera, puede tener un efecto disuasorio, pero no es la solución al problema”.

Por su parte, integrantes del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) en el referido país, manifestaron su inquietud por el riesgo que puede significar, que militares asuman labores de control y competencia que son correspondientes a la policía de fronteras.

Constanza Valdés, del INDH, indicó que “se envió un oficio a los ministerios del interior y defensa para conocer los protocolos empleados por las Fuerzas Armadas en los controles de identidad”.

Cabe destacar, que la frontera de Chile con Perú consta de dos tramos, uno marítimo y otro terrestre de 169 kilómetros de largo, mientras la de Bolivia, tiene más de 800, y por ella transitan, entre 200 y 400 indocumentados de numerosos países, como Venezuela, Bolivia, Perú, El Salvador, Colombia y Haití, a través de pasos no habilitados, según el alcalde Javier García, de la Región de Tarapacá.

AGENCIAS