CIUDAD MCY.-Una población traumatizada y exhausta está hacinada en una porción de tierra cada vez más pequeña, advirtió el subsecretario general para Asuntos Humanitarios de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Martin Griffiths, tras los masivos desplazamientos en Gaza.

En un mensaje publicado en su cuenta en X, antes Twitter, el alto representante insistió en los serios obstáculos que persisten, para llevar más ayuda a los necesitados, en medio de los bombardeos israelíes y los intensos combates sobre el terreno.

Al menos 100 mil desplazados llegaron a Rafah en los últimos días, lo que empeora las ya terribles condiciones en la parte más meridional del enclave, de acuerdo con las agencias sobre el terreno. Por su parte, las autoridades sanitarias de Gaza aseguraron que la mitad de todas las mujeres embarazadas, que buscan seguridad en refugios en la Franja, sufren de sed, desnutrición, falta de atención médica, y vacunas para los recién nacidos.

En tanto, los niños desplazados enfrentan deshidratación, desnutrición y enfermedades. La más reciente ola de desplazamiento, es resultado de la intensificación de las hostilidades en la ciudad sureña de Khan Younis y Deir al Balah, en el centro de Gaza, así como por órdenes de evacuación emitidas por el ejército israelí.

Hace unos 10 días, ya se estimaba que Rafah era la zona más densamente poblada de Gaza, con 12 mil personas por kilómetro cuadrado, precisó la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).  Asimismo, alertó que el acceso a la ayuda sigue comprometido, a pesar de la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU adoptada la semana pasada, que pedía un aumento de las entregas.

Información de Prensa Latina