CIUDAD MCY.-Miguel Rojas no necesita recordatorios de la importancia que tiene la Liga Venezolana de Béisbol Profesional para él. Varias temporadas de más 100 juegos disputados en las Grandes Ligas, en donde este año disfrutó de su décima campaña, no han cambiado el hecho de que la pelota criolla tiene un sabor diferente y único, que el mirandino no puede dejar de probar cada vez que tiene la oportunidad.

Y gran parte de eso tiene mucho que ver con sus orígenes, en su estado natal de Miranda. Como nativo de Los Teques, Rojas disputó varios campeonatos infantiles en el área y conocía a la gran mayoría de los pequeños que, como él, intentaban construir un camino hacia el profesional. No todos lo consiguieron; de hecho, fue la gran mayoría la que tuvo que buscar eventualmente otra profesión, pero hubo uno que se mantuvo fiel a su sueño, trabajando tan duro como “Miggy Ro” para encontrar el anhelado destino.

“Ha pasado mucho tiempo desde que jugué con peloteros como Ehire Adrianza”, admitió Rojas sobre el grandeliga oriundo de Guarenas. “Empezamos nuestras carreras juntos, jugamos desde chamos. En esta liga hay muchos reencuentros, muchas reuniones. Es algo muy bonito”.

Como miembros de los Tiburones, ambos ligamayoristas han tenido la oportunidad de compartir el terreno de juego en la 2023-2024. Pero si bien los reencuentros son especiales, las primeras experiencias también lo son. De esas, el torpedero tiene mucho por decir.

Al igual que en la campaña anterior, el circuito nacional se ha vestido de gala en esta ocasión para abrir sus puertas a Ronald Acuña Jr., el máximo exponente venezolano de las Grandes Ligas en la actualidad y el recién nombrado como Jugador Más Valioso de la Liga Nacional.

“Esta liga te brinda la oportunidad de jugar con peloteros que son rivales en los Estados Unidos, como Acuña”, continuó Rojas. “Estoy muy emocionado de poder compartir con él. Soy compañero del mejor pelotero de las Mayores, eso es lo bonito de esta liga”, agregó.

Y por si hiciera falta algún aliciente adicional, el actual jugador de los Dodgers de Los Ángeles también disfruta de cumplir el rol de mentor. Pero más allá de esparcir sus conocimientos, Rojas lo toma como una relación de dar y recibir.

“Todos los días se aprende algo nuevo y eso es lo más interesante de reencontrarse con esta liga. No solo con los veteranos, sino con todo el talento joven. Hay que apoyar a los que quedan aquí en el futuro”, explicó el toletero. “Maikel García, Ronald Acuña Jr., Oswaldo Cabrera. Quiero que todos esos peloteros vean el ejemplo de los más experimentados, pero que también nosotros podamos aprender de ellos. El juego se va movimiento muy rápido y ellos nos aceleran a nosotros, a los que estamos en los últimos años de nuestras carreras”.

¿Pero qué podría aprender un pelotero de 34 años de edad sobre uno de 25 o 23?

“Una de las cosas que más quiero ver es cómo se preparan”, enfatizó Rojas. “Cómo se ponen ready para afrontar los juegos. Creo que tengo mucho por aprender todavía y estoy orgulloso de estar aquí, porque puedo compartir con mucho talento joven, nuevo, con el que no había tenido la oportunidad de jugar”, añadió.

Sin embargo, después de lo vivido por los Tiburones en la contienda pasada, en la que alcanzaron su primera final en más de una década, quizás el reencuentro más esperado del campocorto no era con alguien del clubhouse.

“Estuve en el dugout el año pasado y sentí la emoción de todos por llegar a la final. La bulla y alegría de los fanáticos, era increíble”, recordó. “Quería ser parte de esto y por eso me reporté lo más temprano que pude. Deseo formar parte de lo que son los Tiburones en esta nueva era y esperemos que cada vez los resultados nos acompañen más y más para lograr ese campeonato”, concluyó.

 

PRENSA LVBP