*Un 19 de abril, al final de la primera década del siglo XIX fecha que marca un hito histórico al darse el inicio a la Independencia de Venezuela, fue cuando el pueblo caraqueño desconoció el mandato de la máxima autoridad de la Corona Española en tierras venezolanas*
CIUDAD MCY.-Han trascurrido 215 años desde ese 19 de abril de 1810, a tempranas horas de la mañana cuando los miembros del Cabildo Municipal de Caracas se reunieron en su sede, situada en la Plaza Mayor (actual plaza Bolívar) y frente en la Casa Amarilla, hoy sede de la Cancillería venezolana.
En ese momento se desarrollaba un Cabildo extraordinario que el capitán general Vicente Emparan, autoridad de mayor nivel del Imperio español, no había convocado y quien era el único funcionario legalmente autorizado para hacerlo, fue como se dio la primera demostración revolucionaria en firme por parte de los integrantes del Cabildo de Caracas.
Emparan condenó el acto y no deseaba participar en la reunión, donde se le interpeló acerca de la crítica situación de España, puesto que ésta había perdido poderío tras la renuncia del Rey Fernando VII y la disolución de la Junta Suprema que lo había designado.
Uno de los hechos más llamativos, históricamente hablando, fue cuando Emparan obligado a presentarse ante la masa se asoma al balcón del ayuntamiento y dirigiéndose al pueblo le pregunta si estaba contento con él y si había la voluntad de que se mantuviera al mando. Ante la consulta se origina un ¡No! rotundo. Entonces el mandatario exclama: ¡Pues yo tampoco quiero mando!
El Cabildo de Caracas, con sus 2 alcaldes José de las Llamozas y Martin Tovar Ponte a la cabeza, asumió el poder, incorporando a representantes del clero, del pueblo y de los pardos, mientras que el mando militar pasaba por el momento a manos de los oficiales criollos Nicolás de Castro y Juan Pablo Ayala.
El Acta del 19 de abril fue redactada y firmada por todos los asistentes al Cabildo y también fue leída al son del tambor por los escribanos Fausto Viaña y José Tomás Santana en diversos parajes de Caracas.
MEJOR MANERA DE CONOCER LA HISTORIA
Estos sucesos darían entonces lugar a la formación de la Junta Suprema de Caracas, “Defensora de los derechos de Fernando VII”, a cuya cabeza se colocarán los dos alcaldes del Cabildo caraqueño.
Como es sabido, pronto la Junta Suprema de Caracas cambiaría de tercio: ya no querría defender los derechos del monarca, sino buscar la independencia de España, como se vería en los sucesos de los meses siguientes.
El 19 de abril fue un acto esencialmente revolucionario, una acción patriótica que no derivó en derramamiento sangre y que daría inicio a una gesta de carácter civil, antes que la militar.
Los sucesos que ocurren entre 1810 y 1812, son netamente civiles, y se sustentan mediante argumentaciones jurídicas y políticas con la firma del Acta del 19 de Abril de 1810, la formación del primer Congreso de Venezuela el 2 de marzo de 1811, hasta la promulgación de la primera Constitución de Venezuela, el 21 de diciembre de 1811, pasando por el Acta de Independencia del 5 de julio de 1811.
Leyenda: Juan Lovera, “El tumulto del 19 de abril de 1810”, 1835. Óleo sobre tela, 139 x 98 cm. Colección Palacio Municipal de Caracas, Caracas, Venezuela
Obra inmortal
Esta representación pictórica muestra un episodio de uno de los sucesos que se considera fundacional en la historia patria de Venezuela. Juan Lovera, su autor lo realizó en 1835, 25 años después del acontecimiento del 19 de Abril de 1810 y denominado por la historiografía oficial como la Declaración de Independencia de Venezuela.
El cuadro se focaliza frente a la catedral de Caracas. En el centro de la composición destaca Vicente Emparan, de origen vasco y noveno capitán general de Venezuela cuando es obligado a volver al cabildo. En ese entonces tenía 63 años, pero en la pintura luce menor. Viste uniforme de mariscal de campo, lleva su bastón de mando y saluda a la multitud con su sombrero. La multitud compuesta por los diversos estamentos políticos, militares, eclesiásticos y sociales de entonces. Lovera donó su cuadro a la Diputación Provincial de Caracas, cuyos miembros lo acogieron con entusiasmo y recompensaron al artista con 300 pesos.
MIJAIL TOVAR | IMÁGENES REFERENCIALES
