CIUDAD MCY.- Las comunidades originarias del mundo impulsan la creación de la Organización de Naciones Originarias (ONO) como alternativa frente a las Naciones Unidas (ONU), con el propósito de garantizar a los pueblos indígenas un reconocimiento político pleno en el escenario internacional.
Los representantes sostienen que no encuentran espacio en un sistema eurocentrista, marcado por el colonialismo y una lógica materialista que privilegia el consumismo sobre el respeto a los recursos naturales, generando procesos de deshumanización, según declaró el representante de la organización y descendiente inca, Silvio Ayala Pacheco.
La primera misión de la ONO es la defensa de los territorios ancestrales y la preservación cultural, frente a Estados que en diversas regiones limitan el ejercicio de los derechos indígenas. El dirigente señaló que el extractivismo contemporáneo suele ir acompañado de la criminalización de líderes comunitarios y defensores ambientales, una práctica que la ONO busca enfrentar mediante declaraciones públicas, observación internacional y redes de apoyo regionales.
Otro eje de trabajo es la disputa lingüística y política. Ayala subraya la diferencia entre “pueblos indígenas” y “naciones originarias”, defendiendo que el término nación implica continuidad territorial e identidad propia, mientras que “pueblo” fue impuesto por tradiciones coloniales para designar grupos subordinados sin tierra ni reconocimiento político.
La ONO también coloca en el centro la batalla comunicacional, especialmente en países atravesados por el racismo estructural y medios que reproducen estereotipos o silencian las voces indígenas. La organización busca deconstruir esas narrativas y visibilizar la diversidad originaria. La propuesta inicial fue aprobada en 2022, cuando el Consejo de Nación del Tawantinsuyu (Conatagua) convocó una primera asamblea general con delegaciones de catorce países de América, con el objetivo de articular esfuerzos entre comunidades originarias.
En 2024, la iniciativa se consolidó durante la Asamblea Mundial de Cusco, Perú, donde se formalizó la estructura de la ONO. Ayala Pacheco afirmó que la organización constituye “una alternativa ante una multicrisis sistémica mundial”.
Fuente: TeleSUR | FOTO CORTESÍA