CIUDAD MCY.-Tras seis años de ausencia, en los que reaprender y reconstruirse fueron una obligación, el lanzador venezolano, Albert Suárez, volvió al béisbol de Grandes Ligas para robar aplausos y ovaciones a la afición de Baltimore. En retrospectiva, el retorno fue mucho más especial que su estreno.

Un pitcher que ahora tiene una nueva oportunidad para jugar las Grandes Ligas como un premio a su resiliencia. “Trabajé duro para esto. Creo que cuando trabajas duro y tienes fe en algo, las cosas suceden”, concluyó el diestro de 34 años.

“Creo que disfruté este momento más que cuando fui subido a Grandes Ligas por primera vez. Es asombroso para mí”, admitió el venezolano, que abrió el juego del miércoles en sustitución de Tyler Wells, colocado en la lista de lesionados por una inflamación en el codo.

“Es una gran sensación estar aquí”, sostuvo aún incrédulo, después de lanzar 5.2 innings en blanco, en los que apenas permitió tres hits, no entregó boletos y ponchó a cuatro para mantener su efectividad inmaculada.

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