El 10 de diciembre es el Día Mundial de los Derechos Humanos porque se consagra el compromiso por la vida, la justicia y la igualdad de las personas, pero, justamente, la región caribeña y suramericana se ha vuelto peligrosa por la serie de ataques ilegales con resultados de muerte y destrucción
CIUDAD MCY.- Los ataques de Estados Unidos a embarcaciones en el mar Caribe y el océano Pacífico, bajo la excusa de enfrentar una lucha contra el narcotráfico, son injustificables. Estas agresiones violan flagrantemente el Derecho Internacional, por lo que se debería investigar de forma independiente, rápida y transparente.
Van más de 80 las personas muertas durante unas evidentes ejecuciones extrajudiciales de tripulantes de unas menudas embarcaciones, independientemente de la conducta delictiva que se les impute. Pese a las decenas de muertos de nacionalidad venezolana, colombiana y trinitense, Washington no ha presentado una sola prueba que sostenga sus acusaciones.
Contrariamente, el Gobierno de EEUU argumenta que sus acciones forman parte de operaciones necesarias contra el narcotráfico y el terrorismo, y se “ajustan al derecho internacional humanitario”.
DELITO, PROCEDIMIENTOS Y LEYES
El combate al tráfico ilícito de drogas, a través de las fronteras internacionales, es una cuestión de aplicación de la ley, por lo que esa lucha debe regirse por las estrictas limitaciones del uso de la fuerza letal, establecidas en las leyes internacionales de derechos humanos, que solo permiten esas acciones como último recurso contra personas que representan una amenaza inminente para la vida, por lo que se debió utilizar métodos policiales, como la interceptación legal de embarcaciones y la detención de los sospechosos.
Sin embargo, de acuerdo a los videos divulgados, las personas a bordo de las embarcaciones atacadas no parecían representar una amenaza inminente para la vida de otros, ni justificar de otro modo el uso de la fuerza letal contra ellas, según el derecho internacional.
Si bien el combate al narcotráfico es complejo, EEUU está obligado a respetar el derecho internacional y apegarse a las estipulaciones y procedimientos de los tratados antinarcóticos aplicables a los casos de delitos con drogas ilícitas.
Estados Unidos, por ser firmante de tratados y acuerdos globales en materia de la lucha antinarcótica, tiene que cumplirlos, aunque su normatividad nacional resulte contradictoria con las normas de ese tratado. Esto implica que EEUU, al ser signatario de las convenciones de drogas no puede, mediante su legislación nacional, cambiar los compromisos contraídos internacionalmente.
DDHH INTERNACIONALES
Expertos de Naciones Unidas y organizaciones de derechos humanos acusaron a Estados Unidos de violar el derecho internacional y los derechos humanos al cometer supuestas “ejecuciones extrajudiciales”.
Estas acusaciones se centran específicamente en las operaciones militares y en los bombardeos llevados a cabo por fuerzas estadounidenses contra embarcaciones en el mar Caribe y el Pacífico.
La portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Ravina Shamdasani, declaró que las operaciones militares norteamericanas representan una violación del derecho a la vida y constituyen “ejecuciones extrajudiciales”.
¿CELEBRAR LOS DERECHOS HUMANOS?
La idea de festejar por los Derechos Humanos, en el contexto de los recientes bombardeos de Estados Unidos en El Caribe, solo podría verse como una contradicción, ya que estos ataques podrían verse como posibles violaciones del derecho internacional y los derechos humanos.
Ahora bien, se ha hecho parte del debate internacional el doble ataque contra un bote el 2 de septiembre, lo que ha desatado una intensa averiguación legal, además de críticas internacionales por la acción ilegal de asesinar a dos individuos sobrevivientes de un naufragio.
Fuera de un conflicto armado, ese doble ataque viola el derecho internacional de los derechos fundamentales y el término para un asesinato premeditado fuera de un conflicto armado es homicidio.
El asesinato en alta mar es un crimen. La conspiración para cometer asesinato fuera de Estados Unidos es un crimen, y bajo el estamento militar, convierte el asesinato en un delito.
MARCOS GAVIDIA │ FOTOS : AGENCIAS
FUENTES: UNODC.ORG / OHCHR.ORG / MISION VERDAD

