CIUDAD MCY.-En lo que muchos interpretaron como una despedida, Hugo Chávez se dirigió a su pueblo el pasado 8 de diciembre, unas horas antes de viajar a La Habana para ser intervenido por cuarta vez del tumor que se le detectó a mediados de 2011.
Durante su último discurso en televisión, Chávez anunció que las células cancerígenas se habían reproducido y que debía partir de nuevo a Cuba para seguir un tratamiento que presentaba ciertos »riesgos» de naturaleza »innegable».
«Es absolutamente necesario, es absolutamente imprescindible someterme a una nueva intervención quirúrgica», señaló el mandatario, que apareció flanqueado por su vicepresidente, Nicolás Maduro, y el presidente de la Asamblea venezolana, Diosdado Cabello.
En la cadena, Chávez habló por primera vez de la hipótesis de que «circunstancias sobrevenidas» pudieran impedirle continuar con el mandato.
El mandatario aprovechó su intervención para señalar a Maduro como su sucesor.
«Mi opinión firme, plena, como la luna llena, irrevocable, absoluta y total es que en ese escenario que obligaría a convocar a elecciones presidenciales, ustedes elijan a Nicolás Maduro como presidente de la República Bolivariana de Venezuela», dijo.
Según algunos analistas, con la designación de Maduro, Chávez trató de cortar de raíz disputas internas en el oficialismo.
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