***El uso del talco tiene una gran variedad en la vida cotidiana del ser humano, especialmente en el ámbito de la cosmética y la farmacéutica****

CIUDAD MCY.- La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el talco como un producto “probablemente cancerígeno” para los humanos. Tal afirmación fue hecha por la Agencia Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC), órgano de la OMS que se encarga de identificar el potencial cancerígeno de las sustancias. En sus investigaciones ha concluido, que este mineral puede tener capacidad para causar cáncer en la población.

Los resultados de esta investigación, incluyendo la evaluación de ambos componentes, se han publicado en la revista científica The Lancet Oncology, y una versión completa del estudio se publicará en las monografías de la IARC, volumen 136, en 2025.

Estas conclusiones, fueron obtenidas en el mes de junio de 2024 por un grupo de expertos de distintos países, que señaló que el talco ha sido añadido al grupo 2A como «sustancia probablemente cancerígena para los humanos», y el acrilonitrilo en el grupo 1 como «agente cancerígeno».

Según el comunicado efectuado por esta unidad de la OMS, el talco “exhibe características clave de carcinógenos en células humanas y de sistemas experimentales, como el acrilonitrilo, un compuesto que se emplea en el sector textil y para plástico de consumo, como “cancerígeno” para los humanos.

¿QUÉ SON ESTOS COMPONENTES Y PARA QUÉ SE USAN?

El talco, es un mineral natural empleado en cosmética y polvos corporales, la IARC lo ubica, en el nivel 2A, que es el segundo escalafón más alto dentro de su pirámide de identificación de peligros: esto quiere decir que, aunque hay una evidencia limitada de que pueda provocar tumores en humanos en concreto de ovario, también hay la certeza que genera cáncer en animales de experimentación y se dispone, además, “de una fuerte evidencia mecanicista”.

Es un mineral silicato que se extrae en muchas partes del mundo. Según la IARC, además de la exposición ocupacional a este producto (durante su extracción o procesamiento), la población general puede entrar en contacto con esta sustancia a través del uso de cosméticos o polvos corporales que contienen este mineral, como maquillajes o desodorantes. Uno de sus usos más extendidos es quizás el cuidado de la piel de los bebés.

Es habitualmente de color blanquecino, que contiene propiedades antisépticas, antitranspirantes, absorbentes, calmantes y antiadherentes, entre otras. Se utiliza principalmente en productos cosméticos e industriales, pero también en la agricultura

Aunque no está comprobado, también puede estar presente en alimentos, medicamentos y otros productos de consumo. La agencia del cáncer de la OMS muestra, además, su preocupación por la contaminación del talco con asbesto (una sustancia similar al amianto y considerado un peligroso cancerígeno): aunque es difícil de medir, asegura, este riesgo “puede llevar a la exposición de los trabajadores y de la población en general al asbesto, por ejemplo, a través de maquillaje y polvos

¿QUÉ PELIGRO REPRESENTAN PARA LA SALUD?

La exposición puntual con el talco no garantiza la formación de células cancerígenas, pues el nivel de riesgo dependerá del tiempo de exposición o las dosis, además de otros factores no relacionados directamente con la sustancia.

No obstante, el estudio sí que recomienda evitar su uso y, a raíz de la nueva clasificación obtenida, el uso de esta sustancia debería ser revisado en las políticas de salud pública a nivel mundial.

Periodista Reina Betancourt