CIUDAD MCY.- El profesor Nnamdi Hodge, experto en el idioma patois y docente del curso de “Español y Cultura Venezolana”, impartido por el Instituto para la Cultura y la Cooperación (IVCC) de la Embajada de Venezuela en Trinidad y Tobago, expuso acerca del impacto de la cultura trinitobaguense en el país suramericano a estudiantes del Club de Español, de la Biblioteca Nacional de la nación caribeña (Nalis, por sus siglas en inglés).

Durante el taller, se examinó la presencia trinitaria en El Callao y Paria (Macuro, Güiria y Don Pedro) en la línea de la música, la lengua, los juegos y la gastronomía. “Sabemos que los trinitarios fueron a estas regiones en busca de empleo, y finalmente se establecieron allí, trasladando consigo su lengua y su cultura”.

Destacó que muchas personas del Caribe, principalmente de Trinidad y Tobago, migraron a El Callao en busca de empleo en las minas de oro establecidas por compañías inglesas y francesas. Esta migración empezó a mediados del siglo XIX, y se redujo considerablemente a comienzos del siglo XX. Sin embargo, destacó que la contribución cultural más significativa de los trinitobaguenses en El Callao ha sido el calipso y el carnaval.

Añadió que, curiosamente, la difusión del patois, así como del inglés, en esta región se debió al aislamiento de los pueblos del oriente venezolano en esos años, ya que carecían de conectividad a través de carreteras. El profesor explicó que otro hermoso personaje que también tienen en común son las ataviadas madamas, particularmente las de El Callao, que llevan disfraces que se parecen mucho a los vestidos criollos del Caribe, llamados dwiyets.

AGENCIAS