***Lula: Entre socios estratégicos debe existir la premisa de confianza mutua y no de desconfianza y sanciones
CIUDAD MCY.- El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, cuestionó ante la presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, el anexo al acuerdo entre la Unión Europea (UE) y el Mercado Común del Sur (Mercosur) incluidos por los europeos, que prevé sanciones en caso de incumplimiento de obligaciones ambientales.
«Le expliqué a la presidenta von der Leyen las preocupaciones de Brasil con el instrumento adicional al acuerdo, presentado por la Unión Europea en marzo de este año, que amplía las obligaciones de Brasil y las somete a sanciones en caso de incumplimiento», dijo el mandatario tras la visita de la representante europea a Brasilia.
CONFIANZA MUTUA
«La premisa que debe existir entre socios estratégicos es la confianza mutua, y no la desconfianza y las sanciones», agregó.
La UE y Mercosur firmaron el acuerdo en 2019, pero en la fase de ratificación algunos países se negaron hasta que el gobierno del entonces presidente ultraderechista Jair Bolsonaro se comprometiera a adoptar una serie de medidas ambientales, especialmente el control de la deforestación.
La UE propuso establecer un protocolo adicional con cambios en el capítulo sobre comercio y desarrollo sostenible, que incluye obligaciones, especialmente en materia ambiental, y sanciones en caso de incumplimiento.
POTENCIALES RESTRICCIONES
Brasil argumenta que, con este protocolo, la Unión Europea está poniendo trabas al desarrollo del poderoso sector del agronegocio por motivos que van más allá de la preservación ambiental.
«La Unión Europea aprobó sus propias leyes con efectos extraterritoriales y que modifican el equilibrio del acuerdo. Estas iniciativas representan potenciales restricciones a las exportaciones agrícolas e industriales de Brasil», declaró Lula.
Recientemente, el bloque europeo aprobó una ley para cerrar su mercado a productos, como el café, la soja o la carne, que contribuyan a la deforestación o la degradación de los bosques, algo que desagradó a países como Brasil.
DE GIRA
Brasil es la primera parada de la gira que la presidenta de la CE inició este lunes por América Latina, que incluye también Argentina, Chile y México.
Uno de los propósitos de la gira, en el marco de las consecuencias económicas que ha provocado el conflicto bélico en Ucrania, es conseguir socios que ayuden a los miembros de la UE a reducir su dependencia de los combustibles fósiles, especialmente los procedentes de Rusia.
MARCOS GAVIDIA / AGENCIAS