CUIDAD MCY.-Este miércoles se prevén movilizaciones en varias ciudades de Ecuador, incluida Quito, convocadas por organizaciones sociales como la Unión Nacional de Educadores (UNE) y el Frente Unitario de Trabajadores (FUT). Las protestas se enmarcan en el rechazo a la eliminación del subsidio al diésel y otras medidas económicas adoptadas por el Gobierno.
La UNE informó que la jornada busca defender derechos, exigir justicia y rechazar la criminalización de la protesta. Las manifestaciones se suman a más de 20 días consecutivos de movilizaciones en distintas provincias, especialmente en la región andina, lideradas por el movimiento indígena.
El Gobierno de Daniel Noboa ha desplegado fuerzas policiales y militares con el objetivo de poner fin a las protestas esta semana. “Esperamos que se acabe hoy y diría máximo mañana, pero no vamos a permitir que la situación se alargue a toda la semana”, declaró la ministra de Gobierno, Zaida Rovira.
El martes, se realizó un operativo con miles de uniformados en la provincia de Imbabura, considerada epicentro del paro nacional indefinido convocado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie). La organización demanda la restitución del subsidio al diésel y la reducción del Impuesto al Valor Agregado (IVA), que pasó del 12 al 15 por ciento.
Diversos colectivos, entre ellos la Alianza de Organizaciones por los Derechos Humanos, denunciaron represión militar en Imbabura. Según sus reportes, un convoy identificado como “humanitario” habría intervenido en comunidades indígenas, dejando decenas de personas heridas.
La Conaie emitió un comunicado en el que acusa al Ejecutivo de utilizar la ayuda humanitaria como cobertura para una operación militar. “El convoy, lejos de ser humanitario, fue una operación de guerra contra el pueblo, planificado desde el poder”, señaló la organización. También afirmó que el Gobierno ha optado por la represión en lugar del diálogo.
Por su parte, el presidente Noboa declaró durante un encuentro con agroproductores en Guayas que está dispuesto a dialogar “con la gente que quiere trabajar, pero no con aquellos que quieren destruir la democracia con odio y violencia”.
FUENTE AVN | FOTO CORTESÍA