Ciudad MCY.-La ponencia de la gobernadora Karina Carpio, estuvo orientada a dejar en el pasado todo aquello negativo, para abrazar el presente y ser una madre que deje huella en su familia

CIUDAD MCY.- En las instalaciones del Instituto de la Mujer Aragua (IMA) se llevó a cabo el conversatorio «La Madre que Quiero Ser», una actividad enmarcada el Mes de la Mujer que tuvo por propósito enseñarles a las féminas la importancia de romper las cadenas de la herencia espiritual.

 

La ponencia estuvo a cargo de la gobernadora Karina Carpio, quien a través del acompañamiento y de sabias palabras orientó a las presentes hacia el perdón, enseñándoles la imperiosidad de sanar las heridas del pasado para formar hogares amorosos y sanos; ser una madre respetuosa, con virtud y paciencia que deje un legado positivo en las generaciones futuras.

Como mujer, madre y abuela, la máxima autoridad del estado refirió que no existe un manual que las enseñe a asumir el reto de ser la cabeza de un hogar, es la vida misma y las decisiones que se toman que guían a las personas al futuro.

Ella destacó que la vida es una constante metamorfosis, etapas que le dan una óptica distinta a cada instante, detalles que permiten la evolución y transformación del ser.

En palabras de la mandataria regional, para ser esa madre que deja huella en su descendencia, primero hay que sanar las heridas del pasado, aceptarse, amarse, respetarse, darse el valor que merecen por dar vida y ser el pilar que sostiene el hogar, entender que es merecedora de todo lo bueno que el universo tiene para ella.

«Cuando yo me reconozco como mujer, cuando yo saco de mi vida todas aquellas cosas que me han hecho daño, yo me puedo liberar y definitivamente soy la madre que quiero ser» enfatizó Carpio.

Asimismo, señaló que este tipo de compartir son necesarios para llevar a cabo una catarsis, la liberación de todos los aspectos negativos.

«Estos espacios tienen que hacerse y compartirse cada día más para nosotros poder reunir y unir aquí a las mujeres que están cargadas de tantos sueños, y también cargadas de tantos miedos, pero es el espacio idóneo para que nosotras hagamos esa catarsis tan importante, para poder liberarnos como mujeres y entender lo que representamos realmente para el cielo, representamos para este mundo» puntualizó.

THAIMARA ORTIZ