
***Isberly Martínez recibió la bendición de Dios al caminar con normalidad luego de ser operada de Genu Valgo Severo en su pierna izquierda gracias a la gobernadora Karina Carpio y todo su equipo de trabajo
CIUDAD MCY.-Con una enorme sonrisa y una mirada que vislumbra pureza y esperanza, Isberly Martínez, de 18 años, recibió en su hogar, junto a sus padres y familiares, al equipo de Ciudad MCY, ubicado en la comunidad de Nare, municipio Urdaneta, al Sur del estado Aragua.
Esta joven en la actualidad está colmada de muchos sueños y esperanzas de vida, pero todos esos anhelos de su corazón se vieron eclipsados, cuando a los 6 años la desalineación del fémur y tibia de su pierna izquierda provocó que la rodilla se desviara hacia dentro juntándose con la otra, esto causó una condición que es conocida como Genu Valgo Severo.
Desde su niñez y adolescencia Isberly ha tenido que pasar por innumerables procesos emocionales, debido a que su extraña condición en la pierna izquierda la convirtieron en objeto de burlas; sin embargo, ella aseguró que su inmensa fe en Dios y la de sus padres la llevaron a ser una niña fuerte que lloraba sola en su habitación y sonreía cuando salía de ella.
“Lo más difícil era cuando estaba en la hora del recreo en la escuela y veía a mis compañeros jugar, correr y yo no podía por la condición que tenía. Muchos se burlaban de mí y era muy difícil, pero Dios me ayudó, y tuve a mi prima que es mi mejor amiga y siempre me defendía, ella es un ángel en el camino enviado por Dios que me fue apoyando”, relató.
La etapa más complicada aún no había llegado, cuando cumplió los 12 años los complejos aumentaron, “miraba como mis otros compañeros podían hacer otras cosas y yo no, incluso cuando iba al liceo me escondía para que no vieran como caminaba. Ya cuando llegaba a mi casa me encerraba en mi cuarto sin que mis padres se dieran cuenta, y llorando le pedía a Dios que me ayudara”.

La fe en Dios de los padres y toda la familia fue su consuelo durante años, creyeron firmemente que en algún momento el Señor los escucharía y abriría las puertas necesarias para conseguir operar a la niña.
Fueron años de lucha constante, llamando y buscando toda la ayuda posible sin conseguir respuesta, pero bien dichas las palabras de Isberly “El tiempo de Dios es perfecto” y a los 17 años su vida cambió radicalmente gracias a la gobernadora Karina Carpio, que a poco tiempo de su elección y asumir las riendas del estado Aragua se abocó junto a todo su equipo y cambió la vida de una joven llena de sueños y esperanzas.
Mayra Jerez es la madre de Isberly, esta mujer nunca perdió la fe de que la ayuda para su hija llegaría en cualquier momento y su corazón se engrandeció cuando llegó, “el primer canal fue la señora Carol Alarcón. Ella le habló a Nervin, él es de aquí de la comunidad, le dijo que la gobernadora Karina Carpio nos podía ayudar. Y de ahí fue cuando empezó como abrirse esa puerta a través de una llamada, porque mi esposo iba a la bodega, y en ese momento Carol estaba llamando a Nelly, que la gobernadora le ha mandado a preguntar acá, a la comunidad, qué caso había aquí, que ella pudiera solucionarlo. En ese momento iba llegando mi esposo cuando le estaba llamando, dice, bueno, el primer caso es una niña que, por cierto, el papá viene llegando. Y allí dijimos que todo fue de Dios. Ahí comenzaron las diligencias para gestionar la operación”.
Fue el 8 de febrero del 2022 la fecha que marcó un antes y un después en la vida de Isberly Martínez y toda su familia, Dios obrando a través de sus ángeles terrenales, permitiéndole hoy en día caminar sin dificultad y trabajar en cristalizar ese sueño de ser maestra y convertirse en un ejemplo de perseverancia, fe y de la obra de Dios.
Por otro lado, el Hospital Dr. José Rangel, ubicado en Villa de Cura, municipio Zamora, fue el lugar donde se llevó a cabo la operación con el apoyo de la Dra. Mónica Signini, Flor Gómez y el director del centro, Lord Arias.

Isberly relató el excelente trato que recibió durante su intervención, “me trataron como una princesa, me decían así e hicieron que todo se convirtiera en una bonita experiencia. Los doctores me mostraron mucho cariño y yo también a ellos”.
Esta joven sostiene que Dios y la gobernadora Karina Carpio le cumplieron su deseo más anhelado, “a pesar de todo yo tengo muchas metas y eso es lo que siempre he pensado. Antes yo no me valoraba tanto, antes sentía que no tenía valor, porque miraba a otras muchachas y yo decía, bueno, ¿cuándo yo podré caminar así como ellas?, pero ya después de tantas palabras que me decían y ver que hoy sí puedo hacerlo supe que lo que valgo”.
Ella aseguró que al salir del quirófano luego de la operación no sintió dolor, “Dios siempre estuvo y está conmigo, no sólo por el milagro de lograr operarme, sino porque no sentí tanto dolor al salir de la operación en comparación a mis hermanos que también fueron operados por esta misma condición, ellos sí sintieron mucho dolor, pero yo no, y sé que todo eso era Dios obrando porque fue a su tiempo”.
El mensaje después de un año de operada de Isberly a la sociedad es que se aferren a Dios, porque a través de él encontrarán las respuestas, “no cambiaría nada de mi vida, si volviera a nacer pediría volver a nacer con esta misma condición, con mis padres y vivir toda esta experiencia que sin duda me ha dejado muchas enseñanzas, así que no es el tiempo del hombre, sino el tiempo de Dios”.
Isberly Martínez agradece inmensamente a Dios, a sus padres por nunca rendirse y no dejar de luchar a pesar de las muchas veces que las puertas se cerraron y por supuesto a la gobernadora Karina Carpio por comprometerse a cambiar la vida de esta niña y ratificar que más que razones para hacer el bien, se necesita la presencia de Dios en el corazón y estar lleno de amor para lograr cambiar la vida de los que más lo necesitan.
JENNILET DÍAZ
