*** El Teatro Nacional Rubén Darío en Nicaragua, el cual sobresale por su arquitectura y diseño acústico, constituye el recinto cultural más importante de esta nación centroamericana.***
CIUDAD MCY.- Después de su inauguración en 1969, esta institución fue calificada por el diario estadounidense The New York Time como la cuarta mejor de Latinoamérica, y a juicio de su actual director general, Ramón Rodríguez, es un referente en la región y el lugar donde honran la memoria y la obra del poeta nacional Rubén Darío.
Nosotros reivindicamos la fecha de inauguración porque hemos establecido que cada 18 de enero celebramos el aniversario porque es el día en que nació Rubén Darío, además, marca el inicio de la programación anual de nuestra institución, expresó Rodríguez en exclusiva con Prensa Latina.
El también codirector del Instituto de las Culturas de Pueblos y Juventudes comentó que, si bien las administraciones anteriores velaron por el mantenimiento, nunca lo hicieron como el Gobierno sandinista.
“Desde la primera etapa de la Revolución en los años de 1980 hasta 1990 y ahora, desde 2007, ha estado prácticamente apoyando toda la infraestructura de nuestra institución”, destacó.
Añadió que antes de esa facha en el Rubén Darío poco se presentaban los artistas nicaragüenses, pues era un teatro elitista, donde se hacían buenos espectáculos foráneos, pero nunca nacionales, y no había acceso abierto para el pueblo.
La masividad a la institución nunca se ha visto como en la primera y segunda etapa de la Revolución, afirmó Rodríguez y añadió que no solo sirvió como proyección y promoción de la cultura nicaragüense, sino que también fue el espacio para la formación de coreógrafos, bailarines y músicos.
En ese sentido, el también director de orquesta recordó las capacitaciones de maestros que venían de Cuba, Argentina, México, la antigua Unión Soviética y de todos los países socialistas de entonces.
“Tuvimos un auge de desarrollo artístico gracias a la Revolución, ahora nosotros, 55 años después, en esta segunda etapa, vemos cómo ha florecido el arte y la cultura”, manifestó.
De acuerdo con Rodríguez, desde el 2007 (inicio de la segunda etapa de la Revolución) el teatro desarrolló una perspectiva cultural con presencia a nivel nacional.
Este coliseo de las artes escénicas nicaragüenses alberga un programa inclusivo para niños, jóvenes y adultos, permitiendo que alrededor de 40 mil personas asistan a ensayos generales, óperas y zarzuelas de la Fundación Incanto, lo cual lo convierte en un espacio único.
“Organizamos ocho óperas y cuatro zarzuelas en el año y eso hace que el pueblo venga porque es completamente gratuito”, destacó el directivo.
Aludió a la programación activa de la institución, al tiempo que mencionó los distintos espacios culturales del emblemático edificio, creado por el arquitecto nicaragüense José Francisco Terán Callejas.
“Tenemos el Salón de los Cristales, donde se hace música de cámara y presentaciones de libros, hay una galería para las actividades relacionadas con las artes plásticas y también contamos con el teatro experimental y la Sala Mayor, que es el local principal”, resaltó.
El Teatro Nacional Rubén Darío ha acogido, entre otras, importantes presentaciones internacionales como el Ballet Nacional de Cuba y el Teatro Bolshoi de Rusia, así como reconocidas orquestas sinfónicas de Centroamérica y diversas agrupaciones culturales nicaragüenses.
Además, ha sido el escenario de festivales de boleros, de música clásica y cuenta con un programa de festivales de ballet y danza contemporánea.
“Eso demuestra que nosotros estamos interesados siempre en darle a nuestro pueblo una oferta cultural que abarque todos los géneros artísticos”, señaló el ministro.
Manifestó que el recinto ha roto todos Los esquemas y lo calificó como un teatro único en Latinoamérica, con la visión de aprovechar y desarrollar la cultura a favor de los nicaragüenses.
Fuente Prensa Latina