Petro: Le solicito a la Casa Militar traer la espada de Bolívar. Una orden del mandato popular y de este mandatario Foto: RT

**Paz, nueva política antidrogas, integración, diálogo, seguridad, inclusión, entre otros, son algunos de los desafíos del nuevo mandatario colombiano**

CIUDAD MCY.- Ante miles de personas, con pueblo incluido, se cumplió el esperado acto histórico, Gustavo Petro se convirtió en el primer presidente de las fuerzas progresistas y de izquierda en Colombia.

Antes del discurso, la simbología dominante previa a la investidura fueel recuerdo no explícito a la guerrilla del M-19, donde el ahora presidente Gustavo Petro militó hasta su desmovilización.

María José Pizarro, senadora e hija de Carlos Pizarro, fue la encargada de ponerle la banda presidencial a Gustavo Petro, con una foto bordada en su espalda del comandante guerrillero y candidato presidencial asesinado con la leyenda: “Que la lucha por la paz no nos cueste la vida”.

Luego de tomar juramento como mandatario de Colombia, posesionó a su vicepresidenta Francia Márquez,y la primera orden expresa de Petro fue que se trajera la espada de Bolívar que estaba en Casa de Nariño, y que el expresidente Duque no autorizó usar en la posesión. Después de un receso de más de 15 minutos, con la espada al lado, Petro dio su discurso de posesión.

“Hoy empieza la Colombia de lo posible. Hicimos posible lo imposible. Con trabajo, recorriendo y escuchando, con ideas, con amor, con esfuerzo. Desde hoy empezamos a trabajar para que más imposibles sean posibles en Colombia”, expresó.

 

GOBIERNO DEL PUEBLO

“Aquí está, como en el recorrido de mi existencia, el pueblo”, dijo Petro empezando su discurso. Tanto sus palabras, como varios símbolos y gestos durante su posesión, enviaron el mensaje de que por primera vez el que llegaba a la Casa de Nariño era el pueblo.

Petro tuvo cinco invitados de honor que representaron al pueblo colombiano. Arnulfo de Honda- Tolima, Katherine de Quibdó, Kelly “la barrendera de Medellín”, Rigoberto, un cafetero de Caldas, y el señor Londoño, silletero de Antioquia. “El amor al pueblo, a la gente que sufre excluida, es el que me tiene aquí para unir y construir una nación”, expresó el nuevo mandatario.

El presidente del Senado, Roy Barreras, presentó a Petro como un “hijo del pueblo” y este en su posesión hizo de la Colombia popular una parte central, por lo cual tuvo gestos como la apertura de la plaza de Bolívar al público y la invitación especial a personas del común que lo apoyaron en su campaña. Invitados como una barrendera, un pescador y un campesino, un pueblo compuesto de minorías en donde afros e indígenas tienen un papel protagónico.

 

DUQUE PARTIÓ DE NARIÑO PERO DEJÓ LA VIOLENCIA 

Tras su discurso, en otro acto protocolar, Petro y su familia, acompañados del Alto Mando militar, se trasladaron a la Casa de Nariño, residencia y sede del Poder Ejecutivo, donde el gobernante Iván Duque lo esperó para luego salir de ella.

Con rechiflas, gritos de “fuera Duque”, salió el exmandatario, quien estuvo cuatro años al frente de la sede gubernamental, un periodo considerado de retrocesos en materia de paz y seguridad.

Aun cuando la prensa corporativa regional y mundial insistió en asociar la violencia solo a las acciones de las llamadas «disidencias» de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) y al Ejército de Liberación Nacional (ELN), las cifras revelan que, en la mayoría de los casos, los responsables materiales de los asesinatos, masacres, amenazas y desplazamientos forzados fueron grupos narcoparamilitares, sucesores del paramilitarismo uribista, manejador de Duque, quien prefirió el camino de la militarización de zonas sin abordaje integral a la problemática socioeconómica.

Entretanto, el presidente electo Gustavo Petro ha prometido y puesto en marcha algunas acciones para llevar a los distintos actores armados al diálogo y la justicia.

 

TREGUA ANTE VOLUNTAD DE DIÁLOGO

A pocos minutos del inicio del acto de posesión, el grupo armado sucesor del paramilitarismo Clan del Golfo hizo un anuncio a través de un panfleto en el que informa de un unilateral alto el fuego.

“Decretamos un cese unilateral de hostilidades ofensivas, como expresión de buena voluntad con el Gobierno que inicia y su amplia disposición de búsqueda de caminos de paz para todos los actores del conflicto”, se lee en un comunicado de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, nombre oficial de la banda criminal Clan del Golfo.

De acuerdo con la nota de la organización ligada al narcotráfico, se espera que en Colombia se abra “una era distinta para nuestra atribulada patria”, por lo que levantará “todas las medidas extremas” que ha debido “ejecutar, como ya lo anunciamos en un comunicado en los días previos”.

El grupo delictivo expresó su disposición de sumarse a los diálogos exploratorios de paz anunciados por Petro desde el momento de su elección. “Creemos que es la mejor decisión para la Colombia olvidada que representamos”, se lee en el comunicado.

 

GUERRA A LAS DROGAS FRACASÓ

Petro también señaló que la paz será posible si se cambia la actual política de drogas solamente vista como una guerra, por una política de prevención fuerte del consumo en las naciones desarrolladas.

“La paz es posible si se cambia la política contra las drogas vista como una guerra por una política fuerte de prevención de consumo, es hora de una nueva convención internacional que acepte que la guerra contra las drogas ha fracasado, ha dejado millones de latinoamericanos asesinados y que da 70 mil norteamericanos muertos por sobredosis cada año. La guerra contra las drogas fortaleció las mafias y ha llevado a los Estados a cometer crímenes», explicó el presidente Petro, sin hacer mención de EEUU.

Maduro tendió su mano a Petro para “reconstruir la hermandad”

Al finalizar la toma de posesión,el mandatario venezolano, Nicolás Maduro, felicitó a Petro por su investidura en un video difundido en Twitter, y lo convocó a «reconstruir la hermandad» entre ambos países.

«Tiendo mi mano al presidente Gustavo Petro y al pueblo colombiano, para reconstruir la hermandad sobre la base del respeto y el amor. Aprovechemos esta segunda oportunidad que menciona el nuevo presidente de Colombia, por el bien de la felicidad y la paz. ¡Felicidades!», indicó Maduro.

En su discurso, Petro convocó a la unidad en la región. «Hoy necesitamos estar más juntos y unidos que nunca. Pero la unidad latinoamericana no puede ser una retórica, un mero discurso», sostuvo.

 

Fuentes Russia Today/Sputnik/Telesur/Prensa Latina/Misión Verdad  

MARCOS GAVIDIA