CIUDAD MCY.- El representante de Izquierda Unida en el Parlamento Europeo, diputado español Manu Pineda a propósito de la reciente Cumbre Unión Europea (UE)-Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), y la Asamblea del EuroLat, consideró que el nexo del bloque comunitario con la Celac revela los aportes constructivos que ofrecen los países de esa región.

El hecho es que hay dos formas distintas de ver el mundo. Por un lado, la UE mantiene una actitud de resistencia al avance, al respeto a la soberanía de los pueblos, mientras América Latina y el Caribe está en otras posiciones.

«Todo esto se refleja en los informes que votamos en EuroLat, en los cuales el peso latinoamericano ha conseguido que los textos reflejen progresos respecto a las políticas de odio que tratan de implementar las derechas más reaccionarias a través de distintos medios de comunicación, fake news y las redes sociales, que niegan la violencia machista», apuntó.

El legislador español analizó los debates al interior de la XV Asamblea parlamentaria denominada EuroLat, concluida ayer en Madrid, y los ecos de la cumbre de Bruselas UE-Celac, reseña el portal.

«Otro informe en EuroLat defiende el derecho del acceso al agua y la necesidad de preservarlo. Hemos logrado aprobar estos documentos que en el entorno en solitario de la UE hubiese sido imposible, lo que demuestra la validez de la cooperación entre las dos regiones y el papel esencial de Latinoamérica en el mundo», comentó.

Pineda indicó que un panorama similar se vivió en la Cumbre UE-Celac, en la que se pudo llegar a una declaración final, «que no es tan ambiciosa como hubiésemos querido desde la izquierda, pero sí con elementos imprescindibles, como la condena al bloqueo de Estados Unidos a Cuba, con sus medidas extraterritoriales; y el rechazo a las sanciones a Venezuela».

También, la oposición a una guerra que no sabemos a dónde nos va a llevar en el tablero ucraniano y nuestro interés en la solución del conflicto por la vía diplomática, precisó.

AVN