***La especialidad puede ayudar a las personas a preservar habilidades físicas, que les dan autonomía en su día a día, y a recuperarse de dolencias causadas por la edad o por malas posturas

CIUDAD MCY.- Una especialidad del área de la salud que tiene significativa importancia para brindar bienestar y calidad de vida a adultos mayores es la fisioterapia, ya que les permite preservar sus capacidades físicas de acuerdo con su edad y evitar lesiones, así como tratar dolencias.

En septiembre se conmemora el Día Mundial de la Fisioterapia, oportunidad para crear conciencia acerca de la contribución crucial que hace la profesión para mantener a las personas móviles e independientes, lo cual es de gran valor para quienes padecen trastornos neurocognitivos.

Al respecto, el fisioterapia Alexis Morillo, explicó que “los fisioterapeutas ayudan a los huéspedes con patologías neurodegenerativas a mantener y mejorar su condición física actual, para lograr que tengan mayor autonomía e independencia en todas sus rutinas diarias”.

Añadió que, por lo general, “los adultos mayores presentan limitaciones tales como alcanzar objetos en planos medios o altos, es decir, les cuesta levantar los brazos, por ello se trabaja en fortalecer la musculatura de dichas extremidades, ya que eso los ayuda a realizar mayor cantidad de actividades cotidianas como vestirse, comer, y cepillarse, entre otras”.

Señaló que las sesiones de fisioterapia y de rehabilitación neuromuscular se enfocan en todo el cuerpo, ya que “los ejercicios y estiramientos de los miembros inferiores también son importantes para tener un mejor equilibrio, una marcha más fluida y la fuerza necesaria que permita desenvolverse en el día a día, así como para evitar lesiones y caídas”.

Debilidad muscular, Morillo indicó que es común que los adultos mayores sufran patologías neuromusculares, producto de la debilidad de ciertos músculos, lo que a su vez limita la movilidad articular, “estas afecciones se presentan en la región cervical, que serían las cervicalgias, en la zona lumbar –las lumbalgias-, así como otras que están relacionadas con la edad como los desgastes articulares, principalmente en la rodilla, en la cadera, en la columna, y en los discos intervertebrales. Todo ese tipo de dolencias son tratadas por los fisioterapeutas”.

Estos profesionales de la salud también intervienen en el tratamiento de esguinces o las llamadas “torceduras” de tobillos, que ocurren frecuentemente por la pérdida del equilibrio.

Su labor también se centra en la rehabilitación neuromuscular de los adultos mayores en casos de fractura de cadera, o de las personas con patologías neurológicas como los eventos cerebro-vasculares (ECV); además de la fisioterapia respiratoria, y la que se aplica para ayudar a las personas con padecimientos gastrointestinales como el estreñimiento, a través de la relajación miofascial y técnicas manuales ortopédicas.

Terapias diarias

Indicó además que los huéspedes en esa residencia y centro integral reciben atención diaria y personalizada, por parte del equipo de fisioterapeutas de la institución.

Señaló que “regularmente en la semana tenemos distintos tipos de actividades intercalando diariamente rutinas exclusivas con las extremidades superiores o con las inferiores, o con ambas. En otras sesiones trabajamos la parte del tronco y cuello, para así mantener la fuerza muscular y la amplitud de los rangos de movimientos de las articulaciones, en la medida de lo posible”.

Además, se hacen caminatas supervisadas en  diferentes terrenos al aire libre, como amplios jardines y estacionamientos, “para el entrenamiento de la marcha y mejorar el equilibrio dinámico y estático”.

El licenciado Morillo explicó que la relajación de la musculatura también es parte de la atención y de los cuidados de los fisioterapeutas, quienes tratan con masajes terapéuticos a los huéspedes que tengan zonas del cuerpo contracturadas, “se observa con frecuencia este tipo de afección en la región del cuello, la región lumbosacra, la dorsal o también toda la espalda. Estas son patologías agudas que se producen porque la persona durmió mal, con el cuello en una mala posición, por ejemplo”.

AGENCIAS